Así es, el día de ayer fue aprobada por el Congreso la reforma a la Ley Minera de AMLO, la cual pasó sin pena ni gloria y que seguramente nadie leyó a detenimiento. Y aunque el presidente considera que es un paso importante en la historia de México hacernos con la nacionalización del litio, ni tenemos forma de trabajarlo y peor, ni sabemos cuanto hay en nuestro país.
Y es que, a la par de las celebración del cabecita blanca, el Servicio Geológico Mexicano (SGM) reconoció que existe un “limitado o nulo conocimiento de la estructura geológica del territorio nacional y mar territorial”.
A ver, a ver, ¿somos parte del top 10 mundial con la mayor de litio enterrado en nuestro territorito, el llamado “oro blanco” que igual y hasta nos salvaría de una vez por todas de la deuda externa y ni sabemos exactamente la cantidad de este?
Pues sí. Y es que el SGM explica: “México requiere clasificar e investigar sus minerales críticos, entre ellos níquel, vanadio, galio, cobalto, litio, antimonio, fluorita, grafito, magnesio, elementos del grupo de platino y titanio, entre otros”, dice un documento interno denominado Investigación Aplicada a las Ciencias de la Tierra, con fecha del 1 de enero de 2022.
Con razón nos va como nos va, pero bueno. ¿Qué se puede hacer en este caso?
El SGM, desde agosto de 2021, anda pensando en echar a andar un proyecto de inversión de Exploración por Litio, el cual ayudará justamente a hacer estudios y evaluaciones de ese metal en el territorio nacional, pero se estima que podrían pasar unos 2 años para tener una mayor información al respecto.
En teoría, esta exploración tuvo que haber comenzado en 2021, en donde se esperaba ubicar 52 de las 82 posibles localidades prospectivas, pero no se asignó el dinero suficiente. Sin embargo, en este 2022, el gobierno mexicano ha anunciado dentro de su Paquete Económico que se entregarán 55 millones de pesos necesarios para explorar todas las posibles localidades con indicios de yacimientos de litio, con lo que estarían iniciando los estudios para conocer el potencial del país sobre ese mineral.
“El potencial”, porque según parece, nadie tiene idea de qué se puede hacer con el litio, y si ni siquiera será posible aplicarlo correctamente, pues tanto el SGM y la Cámara Minera de México (Camimex) coinciden en que “no es posible asegurar que exista un yacimiento en el territorio nacional que sea viable para su producción, o no por lo menos con la tecnología actual”.