El director de Emilia Pérez, Jacques Audiard, arremetió contra la protagonista de su película, Karla Sofía Gascón, a quien acusó de adoptar una “actitud autodestructiva” y de “hacerse la víctima” tras la polémica por comentarios racistas y xenófobos que la actriz publicó en el pasado en X (antes Twitter). Audiard calificó de “inexcusables” dichas declaraciones, lo que ha deteriorado su relación profesional.
Jacques Audiard rompe lazos con Karla Sofía Gascón
En una entrevista con Deadline, el cineasta francés reveló que ya no mantiene comunicación con Gascón debido a sus comentarios “absolutamente odiosos y dignos de ser odiados”. Entre las publicaciones controvertidas destaca un insulto dirigido a Selena Gomez, a quien presuntamente llamó “rata rica”.
“Estoy pensando en cómo está haciendo daño a los demás, en cómo está afectando al equipo y a todas las personas que trabajaron tan incríblemente duro en esta película, como Zoe Saldaña y Selena Gomez”, declaró Audiard.
El director también se mostró sorprendido por la falta de autocrítica de la actriz española: “En vez de asumir su culpa, se está haciendo la víctima. Es como si pensara que las palabras no duelen”.
Karla Sofía Gascón responde a las críticas
En respuesta, Gascón publicó un mensaje en Instagram donde aseguró que no tiene “nada que esconder” y se declaró víctima de la “cultura de la cancelación”. Sin embargo, la actriz ha sido excluida de la campaña de promoción de Emilia Pérez y estará ausente de los eventos clave en Los Ángeles, en plena temporada de premios rumbo a los Óscar, donde la película cuenta con 13 nominaciones, incluida la de mejor actriz para Gascón.
Críticas por la representación de México en Emilia Pérez
Durante la entrevista, Audiard también abordó las críticas que ha recibido por la representación de México en el filme, acusado de estereotipar al país y trivializar temas sensibles como la desaparición forzada.
“Parece que me están atacando en el tribunal del realismo. Bueno, nunca he afirmado que quisiera hacer una obra realista. Si quisiera hacer una obra particularmente documentada, haría un documental, pero entonces no habría canto ni baile”, explicó Audiard.
El director reconoció que se arrepiente de no haber rodado la película en México, pese a que la historia está contextualizada en dicho país, lo que ha generado un debate sobre la autenticidad en la producción cinematográfica internacional.