Mientras la construcción del Tren Maya sigue a marchas forzadas y se destruyen las zonas naturales, expertos dan su opinión y no es alentadora.
Jorge Escobar, presidente de la Federación Mexicana de Colegios de Biólogos, advirtió que el Tramo 5 Sur del Tren Maya podría colapsar porque los pilotes están sobre suelo cavernoso y poroso.
Si bien este tramo, que irá de Cancún a Tulum, aún no está en operación, advierte que la vibración podría derrumbar la obra.
Explica que las cavernas se rellenaron para tratar de soportar el peso y la vibración del tren, lo que además tiene costos medioambientales muy elevados.
“Pero por más que coloquen pilotes y rellenen, sigue habiendo una inestabilidad horizontal, que se manifestará al momento en que haya vibración por el avance del ferrocarril, como por frenado y arranque. Ahí es donde tenemos los problemas de colapso”.
Advirtió que en este tipo de obra se requiere un suelo firme y el suelo cavernoso no es adecuado para una construcción así.
Recordar que el suelo de esta región es de tipo kárstico, formado de piedra caliza como producto de la interacción del agua con las rocas durante millones de años.
De acuerdo a los espeleólogos, se trata de un suelo que no es apto para sostener obras tan pesadas como un tren.
Sin embargo y pese a advertencias, la ruta del Tren Maya fue trazada sobre esta zona, llena de cavernas de piedra caliza y altamente porosa.
Impacto del Tren Maya es superior a la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA)
Señaló que el impacto ambiental de inyectar el subsuelo con cemento para tratar de sostener la obra no sólo es ahí, sino más allá porque el líquido se derrama y se distribuye por los ríos subterráneos.
Dentro del proyecto se consideró colocar 10 mil pilotes en el tramo 5 del Tren Maya, pero su verdadero impacto no se consideró en la MIA.
Advierte que en la realidad jamás se dimensionaron realmente las consecuencias de la obra.
Incluso dijo que el proyecto está planteado como “ensayo y error”, así que lo que salga mal será sobre la marcha.
“Lo que no se ha puesto en las evaluaciones ambientales tiene que ver con la previsión y prevención de accidentes, en el caso de fallo de las estructuras de estabilidad vertical y horizontal a lo largo de la vía férrea”.
Algo curioso es que las obras del tramo 5 del Tren Maya iniciaron en febrero del 2022.
Para esa fecha ni siquiera se había entregado la MIA a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), lo que obviamente es ilegal.
¿Qué podría esperarse entonces de una obra que fue iniciada sin los permisos adecuados, a decreto obligado del presidente por considerarse “de interés público y seguridad nacional”?
Si realmente fuera un proyecto estudiado, analizado y bien constituido, ¿por qué habría que saltarse los procedimientos de ley?
¿A qué le estaba huyendo el gobierno federal al hacer todo al vapor?
Tren Maya no consideró otro tipo de costos: Federación Mexicana de Colegios de Biólogos
Jorge Escobar hizo hincapié en que hay muchos otros costos no considerados en el proyecto.
Entre estos costos están las modificaciones a los ríos subterráneos y la alteración a la calidad del agua, sumado al daño a la biodiversidad.
Estas cosas nunca fueron consideradas ni siquiera para tratar de resarcir o compensar el daño.
Tren Maya. Ave muerta dentro de una de las 15mil perforaciones para pilas de concreto y acero en el Tramo 5 Sur, ilegales y sin estudios de impacto ambiental sobre cenotes. Representa un tren de muerte, militar y ecocida. pic.twitter.com/FX7189QebA
— CrisNo (@cris_n0) January 23, 2024
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