En una intensa noche de debate político, los tres candidatos a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México se enfrentaron por última vez antes de los comicios del 2 de junio.
Los temas candentes en la mesa fueron la seguridad, la justicia y la planeación del desarrollo inmobiliario y urbano, generando un intercambio de acusaciones y propuestas.
El candidato Santiago Taboada, representante del PAN, PRI y PRD, se mantuvo en silencio frente a las acusaciones directas de su contendiente Salomón Chertorivsky, quien lo instó a dejar de mentir sobre el tema de seguridad.
Este último, del Movimiento Ciudadano (MC), criticó el “blindaje” ofrecido por Taboada en Benito Juárez, señalando que, a pesar de ello, los delincuentes continúan operando en la alcaldía.
Clara Brugada, candidata de Morena, PT y PVEM, aprovechó para destacar el trabajo de los policías capitalinos y prometió aumentar sus salarios, además de construir un hospital para ellos y sus familias.
Sin embargo, tanto Taboada como Chertorivsky arremetieron contra Brugada, acusándola de negar la crisis de desaparecidos en la Ciudad de México.
El debate también se centró en la planeación del desarrollo inmobiliario urbano, donde los candidatos no escatimaron en críticas.
En el debate Taboada acusó a AMLO de provocar el desorden inmobiliario
Taboada señaló a Andrés Manuel López Obrador como el responsable del “desorden inmobiliario” en la capital, mientras mostraba una lista que denominó como el “cártel inmobiliario de Morena”.
Brugada, por su parte, enfatizó la importancia de elegir una visión de ciudad centrada en el bienestar y la protección de los bienes colectivos, en contraposición a la corrupción y la privatización.
Con este último enfrentamiento, los candidatos han dejado clara su postura frente a los temas cruciales para la Ciudad de México.
Ahora, queda en manos de los votantes decidir quién será el próximo líder que guiará los destinos de la capital.
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