El presidente Andrés Manuel López Obrador se posicionó nuevamente en contra del intento de golpe de Estado perpetrado el miércoles en Bolivia, celebrando la respuesta por parte del Gobierno de Luis Arce y la condena de la comunidad internacional.
“Afortunadamente respondió muy bien el Gobierno de Bolivia, de Luis Arce, respondió muy bien el pueblo de Bolivia, la gente defendiendo la democracia, rechazando el golpe militar”, declaró López Obrador durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.
Detalles del Intento Golpista
La tarde de ayer, se reportó que un tanque tiró las puertas de la sede del Ejecutivo de Bolivia e ingresó a las 15:51 hora local, después de que el comandante general del Ejército boliviano, Juan José Zúñiga, amenazara con tomar la sede del Gobierno y cambiar el gabinete.
Arresto del Comandante General
El comandante general destituido, Juan José Zúñiga, fue arrestado horas después. En declaraciones a medios, Zúñiga afirmó que el presidente Arce “le pidió preparar algo” para aumentar su popularidad. Sin embargo, el ministro boliviano de Gobierno, Eduardo del Castillo, presentó al excomandante Zúñiga ante los medios y afirmó que su objetivo era “tomar el mando” del país, destacando que el intento de “golpe de Estado” no fue un simulacro.
Respuesta Internacional
La comunidad internacional ha condenado enérgicamente el intento de golpe de Estado en Bolivia. La firme respuesta del Gobierno de Luis Arce y el apoyo del pueblo boliviano han sido cruciales para defender la democracia en el país sudamericano. La acción rápida y decidida de las autoridades ha permitido mantener la estabilidad y el orden constitucional.
Declaraciones de AMLO
López Obrador elogió la valentía y determinación del pueblo boliviano, resaltando la importancia de defender la democracia y rechazar cualquier intento de desestabilización. “Fue afortunadamente fallido y se restableció de nuevo la democracia y la legalidad, aun cuando esto afecta mucho”, señaló el presidente mexicano.
El incidente en Bolivia subraya la fragilidad de la democracia en la región y la necesidad de estar alerta ante cualquier amenaza a la estabilidad política. La respuesta del Gobierno de Bolivia y el apoyo de la comunidad internacional han sido fundamentales para contrarrestar el intento golpista y garantizar la continuidad democrática en el país.